En el post de hoy, Francina Balagué, creadora del JECO, el juego de rol de la
comunicación no violenta, trata un conflicto que se generó con su hijo Pau y una amiga, y con los personajes que nos dan las cartas del JECO. Como veréis en los vídeos, pudo enfocar el conflicto desde dos miradas distintas.
Cómo podemos ayudar a nuestr@s hij@s, a transformar sus conflictos?
Pues...una manera es usando
el JECO
Aquí os dejo un ejemplo real:
Mi hijo Pau, de 11 años, estaba enfurruñado y preocupado porque tenía un conflicto con su amiga y no había manera de ponerse de acuerdo.
El desencuentro venía porque él quería comprarse el mismo juguete que se había comprado ella y cuando le preguntó si estaba de acuerdo en que se lo comprara, su amiga le dijo
un no rotundo.
Escuché a Pau, le dí empatía (toda la que pude
) y cuando estuvo listo, propuso a su amiga
volverlo a hablar.
La conversación se estancó y las madres propusimos que se lo dejaran reposar un par de días a ver si alguna de las partes decidía ceder o se les ocurrían otras estrategias que
desencallaran el asunto.
Como él seguía ofuscado y agoviado con el tema, le propuse aprovechar el tiempo de recapacitación y trabajar por su cuenta el conflicto con
el JECO.
Al principio se mostró reacio, le daba pereza , él quería que su amiga cambiase de opinión y ya. Le pregunté si su amistad y el deseo tan grande que tenía eran lo bastante
importantes como para hacer un esfuerzo y probar y decidió intentarlo.
Al JECO, se puede jugar de varias maneras y en esta ocasión, se me ocurrió proponerle jugar sólo con las cartas y hacer tándems de personajes para que pudiese notar la
diferencia entre diálogo de chacales
( des de los juicios y el ataque) y diálogo de jirafas
(des de la empatía y la conexión con los sentimientos y
necesidades)
a la vez que también experimentaba ponerse en el lugar de su amiga.
También opté por no hacer diferencia entre jirafa o chacal hacia afuera o dentro. (Ésto es aconsejable cuando no hay mucha práctica y también con críos)
En los vídeos podeís ver cómo se desarrollaron los diálogos entre chacales, en el primero
y entre jirafas en el segundo
y veréis cómo después de que pudo desahogarse, ampliamente
, empatizar con su amiga y encontrar una solución se dió de forma
natural.
Practicar con la CNV y prepararnos un conflicto antes de hablar con la persona con
la que tenemos el desacuerdo, nos es muy útil para vaciarnos del enfado y ganar claridad sobre lo que es importante para nosotras.
Tanto mi hijo Pau como yo estamos con ganas de que puedan hablar con su amiga des de esta calma y ánimo de encontrar una solución en la que todas ganan.
Ya os contaré…..
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